En la cuarta casa astrológica descubrimos a partir de la emoción nuestra identidad propia y distinta de todas las demás, nos sentimos por asi decirlo. El fuego de la casa astrológica uno arde, sin saber que está ardiendo, el de la casa astrológica cinco, lo hace con plena conciencia, jubilosamente atizado por su propia conciencia de serlo, La naturaleza de la vida es crecer y esta casa asociada normalmente a leo y el sol, refleja nuestra necesidad de expansión, por ser cada vez mas plenos e irradiar lo que realmente somos hacia el mundo, hacia la vida, exactamente de la misma manera en que lo hace el sol. La función primaria del sol es irradiar su luz en todas direcciones y de esta manera da vida a la tierra, pero también es un centro organizador del sistema alrededor del cual giran sus orbitas los planetas, en este sentido el sol es el yo, el ego, el centro de la conciencia alrededor del cual giran los diferentes aspectos de la individualidad que somos. Esta casa astrológica guarda celosamente el deseo innato de que nos reconozcan por las cualidades que tenemos, es la casa de la creatividad, de la manifestación de la particularidad que nos diferencia de los demás, la casa de la generosidad de producir por el placer de hacerlo, la casa de la expresión creativa en todos sus matices y virtudes especiales. Los signos y planetas presentes en la casa astrológica cinco denotan la particularidad con que creamos cosas diferentes, la cualidad de nuestra imaginación plasmada en la realidad, es la firma de nuestro espíritu en su afán de diferenciarse, también esta asociada a los amantes, a nuestra relación con nuestros hijos que son nuestras mas excelsas creaciones
casa astrologica quinta
